Agustín Marchesín está a un paso de convertirse en el séptimo refuerzo de Boca para 2025, cumpliendo un sueño de infancia. Su llegada al club genera revuelo, especialmente por sus declaraciones pasadas sobre River Plate.
La llegada de Marchesín a Boca
La llegada de Agustín Marchesín a Boca Juniors marca un momento significativo en su carrera y en la historia del club. Tras un exitoso paso por Europa, donde se destacó en equipos como el Celta de Vigo y el Porto, el arquero argentino regresa a su país con la ilusión de defender los colores de su equipo de toda la vida.
Marchesín siempre ha sido un ferviente hincha de Boca, y su sueño de jugar en La Bombonera se convierte en realidad. Desde su infancia, el arquero idolatraba a figuras como el “Mono” Navarro Montoya, y ahora tiene la oportunidad de seguir sus pasos y convertirse en un ícono del club.
Su llegada no solo es un refuerzo en la portería, sino también un símbolo de pasión y compromiso. Marchesín ha declarado en múltiples ocasiones su amor por Boca, lo que ha resonado profundamente entre los hinchas. En una entrevista, afirmó: “En River no atajaría, ni lo pensaría”, dejando claro su lealtad al club xeneize.
Con su experiencia en el fútbol europeo y su trayectoria en la selección argentina, Marchesín aporta una gran calidad y liderazgo al equipo. Los aficionados esperan ansiosos verlo en acción, defendiendo el arco de Boca y luchando por nuevos títulos. La Bombonera lo espera con los brazos abiertos, y su llegada promete ser un hito en la temporada 2025.
Además, su regreso se produce en un momento clave para el club, que busca reforzar su plantilla y volver a ser protagonista en el fútbol argentino y continental. Marchesín se une a un grupo de refuerzos que buscan devolver a Boca a la cima del fútbol argentino.